¨SED TODOS DE UN MISMO SENTIR¨
POR. JOSE RAMON MENDOZA
Finalmente, sed
todos de un mismo sentir, compasivos,
amándoos fraternalmente,
misericordiosos, amigables...
1 Pedro 3.8
INTRODUCCION
La expresión ¨Sed todos
de un mismo sentir¨ es usada por los apóstoles Pablo y Pedro tanto en las epístolas
a los Corintios y Romanos como también en la Carta de Pedro.
Es necesario aclarar que
en cada una de ellas hay un contexto diferente, es decir que atacan diferentes situaciones
o problemas dentro de la iglesia que serán solucionados con esta misma
medicina, esta misma terapia o este mismo rango de acción. Veamos el contexto o
hilo temático de esta expresión en cada carta:
1. En Romanos Pablo esta
enseñando la necesidad de seguir el ejemplo de humildad y adoración de nuestro
Señor Jesucristo, en el marco de una vida cristiana práctica.
2. Para la segunda carta a
los Corintios Pablo que ha estado ministrando distintas enseñanzas para que los
creyentes desarrollen el camino de la perfección cristiana, cuando esta iglesia
sufría de divisiones, pleitos internos y pecados ocultos.
3. El apóstol Pedro viene
trabajando enseñanzas para orientar a los creyentes a vivir una vida cristiana
que este a la altura de un pueblo santo, adquirido por Dios, es por esto que después
de instruir a los conyugues como debe ser la relación de pareja, ahora él se dirige
a la Iglesia con el carácter de aquellos que deben tener un mismo sentir.
La palabra SENTIR, viene
del griego Jomofrón que significa: Alcanzar una misma opinión, pensar de una
misma manera o tener un mismo sentir. A continuación, vamos a desglosar los
textos bíblicos que nos hablan de ese ¨mismo sentir¨ y para extraer las
verdades que necesitamos observar, analizar y vivir.
I.
LA
PRESENCIA DEL DIOS DE PAZ Y DE AMOR.
Para vivir en paz con todos.
¨Por lo demás, hermanos, tened gozo, perfeccionaos, consolaos, sed
de un mismo sentir, y vivid en paz; y el Dios de paz y de amor
estará con vosotros.¨
2 Corintios 13.11
1.
La iglesia de Cristo tiene la necesidad de valorar la presencia de
Dios como insustituible en sus dinámicas espirituales y personales. Sólo la presencia
de Dios puede dar gozo, perfección y consolación.
a)
Gozo: Cuando valoramos la presencia de Dios podemos renunciar a lo
temporal para abrazar lo eterno, observe Hebreos 12.2:
¨puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el
cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el
oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.¨
Además, el creyente debe
aprender a gozarse en el Señor, recuerde lo que dijo el Sacerdote Nehemías a un
pueblo compungido por la palabra de Dios en Nehemías 8.10:
¨Luego les dijo: Id, comed grosuras, y bebed vino dulce, y enviad
porciones a los que no tienen nada preparado; porque día santo es a nuestro
Señor; no os entristezcáis, porque el gozo de Jehová es vuestra fuerza.¨
b)
Perfección: Aquí se refiere al proceso de perfeccionamiento
de la vida cristiana, ninguno hemos llegado a la estatura del varón perfecto,
sin embargo, estamos en ese camino. Debemos edificarnos y ayudarnos mutuamente
para alcanzar este objetivo. En este proceso todo debe sumar, la comunión con
otros cristianos, una determinada renuncia a la carnalidad y sobre todo el temor de Dios es fundamental en cada corazón,
Observe en 2 Corintios 7:1:
¨Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de
toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el
temor de Dios.¨
c)
Consolación: Esta palabra en griego se traduce ¨llamar cerca¨,
es decir algo al oído con el fin de dar aliento y fortalecer el ánimo. La iglesia
de manera consciente debe desarrollar acciones de consolación a los creyentes
que sufre. Veamos los argumentos de Pablo en 2 Corintios 1:4-5:
¨…Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas
nuestras tribulaciones,
para que podamos también nosotros consolar a los que están en
cualquier tribulación,
por medio de la consolación
con que nosotros somos consolados por Dios.
Porque de la manera que abundan en nosotros las aflicciones de
Cristo,
así abunda también por
el mismo Cristo nuestra consolación.¨
2. El mismo sentir y la paz.
La presencia de Dios es el refugio del cristiano y el único lugar seguro donde
este debe habitar. Para el apóstol Pablo el fin o meta es tener paz de Dios gobernando
cada corazón de sus hijos y el instrumento o medio para ellos es desarrollar
una vida cristiana donde se experimente este mismo sentir. Así lo expresa Pablo
en su carta a los en Colosenses 3:15:
¨Y la paz de Dios gobierne en vuestros
corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo …¨
3. Buscar el mismo sentir
hasta en el saludo. La expresión ¨saludaos¨ viene del griego Aspázomai
que significa: Abrazar o saludar. Para los orientales el saludo es un momento
especial, de esa manera se acercan y expresan buenos deseos. Hoy para muchos el
saludo es algo insignificante, tanto que salen de la iglesia de primero, para
no saludar a nadie, sin embargo, hay un mandamiento expreso para ello, recuerde
que procuramos tener todos un mismo sentir y cualquiera oportunidad es
importante para lograrlo. Analice el saludo en el contexto de 2 Corintios 13. 12-13:
¨Saludaos unos a otros con ósculo santo.
Todos los santos os saludan.¨
II.
UN
REGALO DEL DIOS DE LA PACIENCIA Y CONSOLACION.
El Padre nos dio a Jesús como modelo
de vida.
¨Pero el Dios de la paciencia y de la consolación
os dé entre
vosotros un mismo sentir según Cristo Jesús, para que unánimes,
a una voz, glorifiquéis al Dios y Padre de nuestro Señor
Jesucristo.¨
Romanos 15.5-6
1. Cristo no se agradó a sí mismo. Jesús
es el modelo a seguir, él vivió una vida desprendida sin egoísmos, por amor sufrió
para darnos salvación y vida eterna.
Nosotros en consecuencia debemos vivir una
vida igual que el, sin egoísmos ningunos, vea lo que escribe Pablo en Romanos
15.1-3:
¨Así que, los que somos fuertes debemos soportar las
flaquezas
de los débiles, y no
agradarnos a nosotros mismos.
Cada uno de nosotros agrade a su prójimo en lo que es
bueno,
para edificación. Porque ni aun Cristo se agradó a sí
mismo…¨
2. La madurez cristiana es también soportar
vituperios, analice Romanos 15.3:
¨Porque ni aun Cristo se agradó a sí mismo;
antes bien, como está escrito:
Los vituperios de los que te vituperaban, cayeron sobre mí.¨
3. Usando la paciencia y consolación de
las escrituras podemos ayudar a otros a superar sus debilidades y flaquezas,
observe en 1 Tesalonicenses 1.14:
¨También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los
ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles,
que seáis pacientes para con todos.¨
4. Leer y aprender la biblia me aportan
crecimiento espiritual y conducen a la madurez. Un creyente maduro maneja
situaciones difíciles y es estimulo a los creyentes inmaduros. Así lo expresa
el escritor en Hebreos 5.14:
¨… pero el alimento sólido es para los que han alcanzado
madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el
discernimiento del bien y del mal.¨
5. Dios ha provisto una fuente de
consuelo y paciencia para el creyente. Siempre debemos acudir a esa fuente
cuando los problemas eclesiásticos quieren separarnos de nuestros hermanos en
la fe. Un ejemplo de eso lo vemos aquí en Romanos 15.5:
¨Pero el Dios de la paciencia y de la consolación
os dé entre
vosotros un mismo sentir según Cristo Jesús…¨
6. Tener el mismo sentir de Jesucristo
me conduce a una vida de profunda adoración. Siguiendo en Romanos 15, notaremos
que sólo es posible alcanzar un estado de unanimidad y unidad cuando somos transformados
en la presencia del padre. Observe el versículo
3:
¨…un mismo sentir según Cristo Jesús, para que unánimes,
a una voz, glorifiquéis al Dios y Padre de nuestro
Señor Jesucristo.¨
III.
UN
LLAMADO PARA PODER HEREDAR BENDICIÓN.
Debo bendecir a otros porque en mi
regazo sólo hay bendición.
¨Finalmente, sed todos de un mismo sentir, compasivos,
amándoos fraternalmente, misericordiosos, amigables;
no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición,
sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que
fuisteis llamados para que heredaseis bendición.¨
1
Pedro 3.8-9
1.
La
importancia del amor fraternal. Dios nos ha redimido y dado la llenura del Espíritu
Santo no solo para nuestro provecho personal, sino mas aun, para que mostremos
su amor al mundo. Así lo dice 1 Pedro 1.22:
¨Habiendo purificado vuestras almas
por la obediencia a la verdad,
mediante el Espíritu, para el amor
fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro…¨
2.
Recuerda
que el amor es el distintivo de todo discípulo de Cristo, el mismo lo dijo en Juan
13:35:
¨En esto conocerán todos que sois mis
discípulos,
si tuviereis amor los unos con los
otros.¨
¨…misericordiosos,
amigables…¨
4.
Dos
prácticas prohibidas. El apóstol Pedro nos plantea que para tener todos ¨un
mismo sentir¨, debemos renunciar a dos practicas muy comunes en la vida
mundana, las cuales son producto a la naturaleza del viejo hombre, estas son:
responder con la justicia del mundo. Las expresiones ¨a mí, el que me la hace, me la paga¨ es producto de
un corazón que guarda odios y rencores que no son compatibles con el carácter cristiano.
Analice lo que nos plantea el apóstol en 1 Pedro 3.9:
¨…no
devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición
sino por el contrario, bendiciendo…¨
Jesús es nuestro ejemplo a seguir, él
nos dio ejemplo, vea como se describe la conducta de Jesús en 1 Pedro 2:23:
¨quien cuando le maldecían, no
respondía con maldición; cuando padecía, no amenazaba, sino encomendaba la
causa al que juzga justamente…¨
Además, la escritura nos instruye
como tratar a aquellos que puedan tener una actitud hostil hacia nosotros,
recuerde lo que se nos dijo en Romanos 12:20:
¨Así que, si tu enemigo tuviere
hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de beber; pues haciendo esto,
ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza.¨
5.
Llamando a los herederos. Ahora vamos a analizar otros aspectos
muy significativos en la meta de ¨tener un mismo sentir¨, en su argumentación el
apóstol nos hace mirar al cielo y contemplar nuestra morada final, la cual es
una herencia segura para todos aquellos que han aceptado a Jesús como su Señor
y Salvador. Los que somos herederos sólo debemos estar tranquilos y seguros a
pesar de las adversidades de la vida terrenal. Como herederos solo podemos echar
mano de lo que hemos heredado: Bendición. Observe como cierra la idea el apóstol
en 1 Pedro 3.9:
¨…sino por el contrario, bendiciendo,
sabiendo que fuisteis
llamados para que heredaseis bendición.¨
6.
La
seguridad de esta herencia. Una garantía es conocida también como las ¨arras¨,
es muy común en las bodas. En dicha ceremonia el esposo le entrega las arras de
su prometida, anticipando con esto la seguridad de una vida juntos y una
herencia compartida. El Apóstol en Pablo lo ilustra de esta manera en Efesios
1.13-14:
¨En él también vosotros, habiendo
oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído
en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, que es las
arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para
alabanza de su gloria.
CONCLUSIONES
2.
Todos
necesitamos aprender los textos e historias bíblicas que nos permitan darle
aliento a nuestros hermanos que sufren.
3.
Al
crecer y madurar como creyente podemos soportar aflicciones y vituperios como
parte de la vida cristiana.
4.
El
amor fraternal sólo será posible si desarrollamos compasión y misericordia lo
cual nos permitirá tener una mayor empatía con otros.
5.
Esta
prohibido todo tipo de venganza, hay que seguir el ejemplo de Cristo.
6.
Nosotros
somos herederos de riquezas espirituales inconmensurables para disfrutarlas.
Atte. Jose R. Mendoza
lavozpastoral.blogspot.com